sábado, abril 03, 2010

Hojarasca...De sacerdotes y demonios...( 1a.Parte)

Ahora tan de "moda"el tema de sacerdotes y sus abusos ,vienen a mi los primeros recuerdos de encuentros con estos seres tan terrenales que muchos se empeñan en montar en inalcanzables pedestales.
Mi infancia transcurrió entre historias de seres fantásticos desde los tradicionales chaneques hasta demoniacas criaturas que vendrían del más allá a jalarnos las patas si osábamos seguir portándonos mal.
La familia de mi madre - como muchas más - era católica más por conveniencia que por convicción; la de papá se crió en medio de la pobreza cruda y plagada de injusticias por tanto en la mente de cada uno de ellos - los tíos que recuerdo - flotaban sin llegar a buen puerto una serie de cuestionamientos que los mantuvo siempre muy, pero muy alejados del catolicismo, mi padre apodado buenamente "liberal " comulgó por vez primera el día que se casó con mamá, y de ahí hasta su muerte siempre cuestionó la conducta de los sacerdotes a quienes tachaba de " reyezuelos sin trono "...
" Pero no todos están podridos, hay de curas a curas" -aclaraba siempre-. Por él supe, en efecto que en esa èlite también existen injusticias seguras, para quienes no se pliegan a las ordenes y caprichos de los "elegidos".
Así un sacerdote de uno de los templos más emblemáticos de mi lugar de origen que coqueteaba con ideas contrarias a las impuestas por la grey católica fue castigado y retirado de su iglesia, nunca supimos a donde fue removido, mi padre extrañaba a su amigo de conversaciones...mucho tiempo después lo encontré enfermo y acabado en un minitemplo de pluviosilla a donde sólo algún perdido como yo hacía parada...al poco se supo por una mini esquela en un diario de esa región de su muerte...
A mi siempre me quedó grabado con su hermosa cabellera oscur, ondulante larga y sus grandes lentes oscuros...
Anterior a él supe del padre Melo, reacio personaje delgado y alto, para entonces ya entrado en años que gustaba de echarse los alcoholes en las cantinas típicas de la ciudad adonde acudía vestido como cualquier mortal y pedía a sus compañeros "de farra" se le dijera " ingeniero, arquitecto, doctor " cualquier título, menos sacerdote o Padre. Por supuesto que era otro de los amigos de ideas que papá frecuentaba. El me bautizó en casa en una ceremonia tradicional y familiar. Se apegaba a las reglas de autoridades ecleasiales y tuvo mucho tiempo uno de los más concurridos templos de la ciudad...

1 comentario:

tonymoca dijo...

Parece que este texto como el tema que tratas tendrá continuación, es un tema delicado, la religión siempre causa polémica y desde mi punto de vista personal mis creencias son limitadas.

En fin seguiré viendo lo que publiques después.

Saludos.